¿Qué es la Inteligencia Artificial?
La idea principal de este newsletter es acercar la IA al médico. Hablar sobre la misma de una manera amena, sin tecnicismos, sin matemática, pero a la vez con rigurosidad.
Adentrándonos progresivamente en este apasionante campo tecnológico que viene ganando terreno y metiéndose en cada rincón de «nuestro mundo» de la medicina.
Y para eso, qué mejor que empezar definiendo el concepto más básico y general que vamos a estar utilizando: la Inteligencia Artificial.
Definiciones de IA hay muchas. La primera fue formulada por John McCarthy en 1956 y define a la IA como:
“La ciencia e ingeniería de hacer máquinas inteligentes.”
Pero esa definición no aclara demasiado el panorama. Otra, quizá más mundana, más sencilla (y que personalmente prefiero), sea la siguiente:
Inteligencia Artificial es toda tecnología que permite a una máquina (computadora o robot), desarrollar una tarea para la que se supone se requiere inteligencia.
Fíjense que no estamos limitando el tipo de tareas que debe realizar. Si una máquina realiza cualquier tarea para la cual consideramos que se necesite inteligencia, es una máquina con «inteligencia artificial».
Esto nos plantea algunas situaciones curiosas. Si yo les pregunto, si para multiplicar 394 x 1037 hace falta inteligencia, seguramente me dirán que sí. Pero cualquier calculadora puede realizar ese cálculo… y difícilmente consideremos a una calculadora «inteligente». Entonces decimos que no, que eso no es inteligencia.
Si yo les pregunto si para jugar al ajedrez hace falta inteligencia, nuevamente me dirán: claro que sí! Pero en 1997, la supercomputadora de IBM llamada Deep Blue le ganó al campeón del mundo Gary Kasparov (considerado uno de los mejores ajedrecistas de todos los tiempos). Entonces ustedes me dirán, que en realidad, es un juego, un ámbito demasiado limitado y específico como para considerar «inteligente» a una computadora que le gane a un campeón mundial.
Si se dan cuenta, hay un patrón en este tipo de razonamientos: cada vez que la IA logra algo que considerábamos propio de la «inteligencia humana», entonces corremos la definición y eso ya no es «inteligente».
¿Y qué pasa ahora que la IA logra igualar, y en muchísimos casos superar, a los médicos especialistas en diagnosticar ciertas patologías?
Llegamos al punto en que necesitamos tomar una decisión: o consideramos a los algoritmos realmente inteligentes, o consideramos que el diagnóstico médico no requiere de inteligencia.
Los leo mis estimados esculapios!
«El verdadero peligro no es que los ordenadores empiecen a pensar como los hombres, sino que los hombres empiecen a pensar como los ordenadores.»
–Sidney J. Harris
Si teinteresa el tema, considera suscribirte, gracias!
[…] la edición pasada de este Newsletter definimos qué es la IA, así que hoy toca definir Machine Learning, y Deep […]